conflictos no tan de adolescentes

 Cuando hablamos de conflictos en clase se nos suele venir a la mente problemas entre los alumnos, algún tipo de discriminación entre ellos. Todos sabemos lo grave que pueden llegar a ser esos problemas que se desarrollan entre los adolescentes. O los niños, pues conflictos de esta índole ocurren tanto en el instituto como en el colegio. Sin embargo también debemos pensar en otro tipo de conflictos, los que tienen lugar entre esos alumnos y sus profesores. Estos son, en ocasiones, más importantes que los anteriores, pues se les da mucha menos visibilidad. El docente muchas veces con el poder de autoridad sobre sus discípulos, lo que hace que a lo largo de un curso se estén produciendo distintos problemas entre el profesor y los alumnos y no se les de nada de visibilidad, porque realmente es difícil llegar a enterarse fuera de las aulas. 

Se me viene a la mente el conflicto que ocurrió en Font de l´Alba, en Terrassa, cuando una niña de 10 años dibujo en su trabajo de clase la bandera de España, de su propio país. La profesora entendió que eso se encontraba fuera de lugar y, según se alega en la denuncia, decidió expulsar a la niña de clase agrediéndola. Una vez que pasó esto la familia decidió tomar recursos legales, pero el centro no se lo puso fácil y la medida a la que se llegó fue que la docente no volvería ser tutora de esta alumna ni sus de sus hermanas. 

Ahí se quedó todo, habiendo sido lo ocurrido una grave muy fuerte, que demuestra claramente que esa maestra no está preparada para dar clases a niños, que sus ideas políticas no la permiten estar al control de un grupo de menores. 

Seguramente si el problema hubiera sido entre los alumnos y con otra bandera nacional extranjera el problema hubiera ido mucho más allá. No me puedo imaginar las consecuencias de lo que hubiera ocurrido si en mi clase de tercero de la ESO alguien hubiera humillado y agredido a nuestro compañero de procedencia búlgara por pintar éste la bandera de país... mínimo habría costado la expulsión del agresor y algún tipo de recompensa. En el caso catalán, desafortunadamente, solo se trataba de una niña de 10 años pintando su bandera española y su profesora.

Al igual que este tipo de conflicto seguramente haya muchos más entre alumnos y profesores, de distinto índole, pero que simplemente no nos llegamos nunca a enterar. Se me viene a la mente también la discusión que se preparó en la clase de mi hermano cuando estudiaba primaria los padres tras meses del curso ya pasados se enteraron que la maestra abría sistemáticamente todas las ventanas a las 9 de la mañana diciendo a los alumnos que es que "olían a tigre". Los padres al final se acabaron enterando porque un chico le preguntó a su madre por una solución para dejar de oler a tigre porque eso le hacía pasar frío en la escuela. 

Lo que quiero decir con esta entrada es que en el aula hay muchos tipos de conflicto y discriminaciones, entendiendo unas como brutalidades (que es verdad que lo son) y pasando por alto otras de las cuales apenas ni nos enteramos, pero que también pueden ocasionar problemas psicológicos a nuestros pequeños. He puesto de ejemplo a las escuelas en vez de los institutos, porque me parece que es donde mas se dan estos conflictos, ya que en el instituto los alumnos ya no se callan tanto, pero no debemos olvidar que esto existe en todos los sitios.